Ya era hora que compartiésemos un postre. Que mejor que hacer uno donde podamos reciclar uno de los alimentos "liberados" y que están cada vez mas caros, el pan.
Tomen el pan viejo que tengan en casa, estoy segura que no sera mas de medio kilo. No importa si ya esta duro....¡mejor!....Partanlo y ponganlo en un envase hondo y cubranlo con leche. Dejenlo remojar hasta que se ablande. Mientras tanto vayan prendiendo el horno, bien caliente, como a 400 grados y enmatequillen el molde donde pondrán la torta.
Cuando el pan este bien blandito, lo espaturran con un tenedor hasta que se vuelva una masa suave, le hechan 4 huevos, media tasa de mantequilla con sal, tres tazas de azúcar, casi medio kilo de queso blanco duro y rayado, eso si debe ser llanero, y una cucharilla de vainilla. Eso lo amasan bien, puede ser con la maquina, pero no importa....debe quedar amazacotada, no muy fina...acuerdense que es una torta que, mientras mas popular quede, mejor sabe. Si tienen a mano una cajita de pasitas, chévere, hechenle y mejor aun, si tienen una botella de ron, compartan con ella un vasito, con el resto brindaran cuando se la coman. Al final remuevanle una cucharada de polvo de hornear. Ahora deben volver a mezclar todo bien, y luego la ponen en el molde, que cubra como la tercera parte de este, no mas.
Ponganlo al horno. Debería tardar una hora para estar lista, pero pueden ir probando con un tenedor hasta que este salga limpio, sin brumitas. Cuando este bien doradita por encima, la sacan y la dejan enfriar antes de sacarla del molde.
Un secreto especial, le pueden poner miel por encima, o una cucharada de helado al lado de cada porción, no se arrepentirán hasta que se midan el próximo pantalón....!
lunes, 18 de agosto de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario